Experto en Ludotecas: programación y organización

PROGRAMACIÓN Y ORGANIZACIÓN

 

“Cuando se entra en una Ludoteca la primera impresión es de sorpresa, de fascinación” (Nilse Helena Cunha).
 
Organización del espacio
 
Aspectos generales para el espacio:
 
Uno de los aspectos básicos en el diseño de una Ludoteca es la disposición del espacio y los recursos lúdicos. El espacio tiene que estar definido para poder otorgar contenido a las diversas dinámicas, estableciendo zonas temáticas diferenciadas según el tipo de juego que se planea para cada espacio.
 
El primer paso para la creación de una Ludoteca es definir cuáles serán sus objetivos y el público al que va destinada. En función de esto será posible definir las actividades y servicios que se prestarán, el lugar de instalación, las normas y reglamentos para su funcionamiento, los materiales y juguetes que deberán ser adquiridos, el perfil de los profesionales…
 
Es necesario realizar un estudio de mercado, una investigación de la comunidad, las condiciones de vida, los hábitos, los juegos… para orientar y definir las actividades, teniendo en cuenta también las tradiciones culturales de la comunidad.
 
El espacio para una Ludoteca puede ser sencillo, pero las instalaciones, la decoración, el mobiliario, la clasificación y la organización de los juguetes deben invitar a jugar, compartir, fantasear, soñar, expresarse individualmente y en grupo, en definitiva, estimular la creatividad y las prácticas sociales.
 
 
El espacio dedicado al juego:
 
El espacio de juego debe reunir ciertas condiciones en cuanto a ubicación, tamaño, mobiliario, decoración, iluminación, etc.
 
El tamaño dependerá del número de usuarios y de su edad, aunque BORJA (1980) señala como 150 m2 de media para un local dedicado al juego.
 
En cuanto a la ubicación creemos que lo ideal es que el local esté situado en una planta baja, sin escaleras ni ascensores, y con ventilación natural. Puede estar emplazado en un bajo de un edificio que, preferiblemente, disponga de un patio exterior o jardín, o bien en una casa singular donde no se moleste al vecindario.
 
Es importante que el local disponga de calefacción en invierno y que el suelo sea de material plastificado, resistente y de limpieza fácil.
 
Otras situaciones posibles para la Ludoteca serían:
 
– En una Casa de la Juventud: Permite la coordinación con otras actividades y entidades y el acceso a otros servicios.
– En polideportivos: Facilita el uso y disfrute de espacios más amplios, ya sea para grandes juegos o deportivos.
– En centros educativos: Tiene la ventaja de poder ofrecer al barrio un espacio lúdico para el disfrute del tiempo libre, además de poder contar con espacios al aire libre o pabellones.
– En centros de tiempo libre: Como una oferta complementaria a las actividades típicas de estos centros (acampadas, campamentos, talleres…), prestando un valioso servicio a la comunidad como espacio lúdico para la infancia y la juventud del barrio.
– En hospitales: Posibilitan la participación de padres y familiares en el juego compartido, facilitando la convalecencia y el estado anímico de los niños.
– En centros de servicios sociales y comunitarios: Como recurso inestimable para programas más amplios de prevención de la marginación, para programas de educación de calle o de educación familiar.
 
 
Organización de los recursos:
 
La organización de los recursos lúdicos no es menos importante. Tener clasificados los juegos, según la edad recomendada de uso, la temática y los beneficios psicopedagógicos que aportan, facilita su colocación estratégica en la Ludoteca, a la vez que permite mantener un control funcional y pedagógico de la colección de juegos y juguetes existente.
 
 
Programación:
 
La programación principal de actividades de la Ludoteca ha de fundarse en el juego libre, a fin de coordinar el esfuerzo, la creación de relaciones sociales, la naturalidad y el proceso de autonomía. El juego libre debe estar asistido por materiales de juego escogidos bajo razonamientos de calidad práctica y pedagógica, con una distribución de espacios racionales y un método que facilite la libertad y el respeto, tanto por los compañeros de juego como por los materiales de la Ludoteca y las instalaciones. Paralelamente al juego libre, se pueden prestar otros servicios, tales como:
 
– Talleres de construcción y reparación de juguetes.
– Actividades en grupo.
– Juegos dirigidos.
– Fiestas y celebraciones.
– Juegos tradicionales al aire libre.
– Semanas temáticas.
– Campeonatos.
 
Las Ludotecas también pueden ofrecer otras actividades a la comunidad en fines de semana, vacaciones o en horario nocturno:
 
– Escuela de Verano.
– Conferencias y charlas.
– Cursillos para educadores.
– Visitas de colegios.
– Cuenta-cuentos.
– Talleres abiertos: Fotografía, bricolaje, cocina, reciclaje, manualidades…
– Servicio de préstamo de juegos y juguetes.
– Servicio de información y asesoramiento (a padres, educadores…).
– Juegos sobredimensionados para dinamizar espacios abiertos.
 
En síntesis, para el adecuado funcionamiento de una Ludoteca, es necesario tener en cuenta las siguientes dimensiones (Dinello):
 
– Área de expresión plástica: Con trazos y marcas pictóricas; puestas en formas tridimensionales a partir de múltiples objetos; realización de esculturas y volúmenes a partir de masas y materiales diversos; collages y creación de maquetas… todo ello con una básica relación de estructuras lógico-matemáticas.
 
– Área de expresión musical: Con exploración y producción de ruidos y sonidos diversos; experiencias de diferenciación auditiva, ensayo de cantos y armonización sonora, experiencias rítmicas y melódicas,… que naturalmente están en relación con las estructuras del lenguaje, es decir, de la alfabetización, de la comunicación social.
 
– Área de expresión escenográfica: Con disfraces, juegos de roles, dramatización de cuentos y leyendas, fantasías, máscaras y animación de títeres, representación de piezas teatrales,… todo ciertamente en relación con los procesos de maduración de la persona.
 
– Área de juegos y movimiento en el espacio: Con evolución del cuerpo en un espacio tridimensional, juegos de carreras saltos y volteretas, juegos de equilibrio, juegos con objetos y circuitos de obstáculos,… todo con relación a la evolución de la imagen del esquema corporal y de la coordinación psicomotora.
 
– Área de iniciación cultural: Con rondas y juegos tradicionales, cantos y bailes folklóricos, narración de cuentos y leyendas,… todo en la relación a la identidad de la persona intrínsecamente relacionado con los valores regionales culturales.
 
– Área de lecto-escritura (Bebetecas): Son espacios que se diseñan especialmente para bebés, con el propósito de motivar todo lo relacionado con las competencias comunicativas. En dicha área deben de existir libros plásticos y de materiales resistentes al uso. Estos pequeños libros no deben de tener textos, sino una variedad de imágenes y formas que se adapten a la cotidianidad lúdica del entorno de los niños. Es necesario precisar que estas prácticas deben de estar acompañadas por padres, animadores y pedagogos especializados en el área de la lingüística.
 
El escenario donde el juego libre tiene lugar es casi tan importante como los juguetes, ya que la disposición, el tamaño y las condiciones físicas de la sala afectan al juego del niño/a.
 
Un espacio donde se sientan cómodos, seguros, en libertad para elegir, explorar y experimentar, es un buen espacio para el juego. Esto es aplicable tanto a los espacios lúdicos en colegios y guarderías, como al hogar y también las Ludotecas, lugares diseñados única y exclusivamente para la diversión de los niños. Por lo que uno de los aspectos fundamentales en el diseño de una Ludoteca es sin duda la organización del espacio y los recursos lúdicos.
 
El espacio, tiene que estar delimitado para poder dotar de contenido las diferentes dinámicas, creando zonas temáticas diferenciadas según el tipo de juego que se propone en cada espacio. Igualmente, hay que tener en cuenta que las medidas de seguridad han de ser las máximas, ya que no se puede olvidar que los usuarios finales de la Ludoteca serán los niños.
 
Los espacios tienen una importancia decisiva para el desarrollo infantil, puesto que en ellos se van a producir múltiples encuentros, situaciones, descubrimientos, juegos, etc. Fundamentalmente cumplen la función esencial de ser los espacios de referencia para los niños, de su identificación como grupo y como individuos.
 
Los espacios deben cuidarse de un modo muy especial ya que el grupo debe encontrarse con un ambiente flexible, espacios polivalentes, creación de un clima acogedor y hogareño, tratar de equilibrar la oferta de estímulos pero sin sobrecargar el ambiente.
 
Vamos a concretar algunos de los aspectos más generales para el espacio:
 
–  Debemos contemplar el ofrecer espacios para el grupo grande, para el grupo medio, así como para la individualidad.
 
–  Cuidar de un modo especial todos aquellos aspectos que favorezcan la identificación y la comunicación en un amplio sentido:
 
– La identificación del gran grupo (por ejemplo: paneles colectivos de fotos o realizados en común por los niños).
– La identificación individual (como símbolos o nombres en cada percha, armario individual, carpeta y cajita personal «de los tesoros»).
– La identificación del pequeño grupo como símbolos alusivos a los mismos (como los elefantes, los pitufos, etc.).
– La identificación de rutinas (con símbolos gráficos alusivos a las mismas como dormir, lavarse, etc.)
– La identificación de zonas o rincones en toda la Ludoteca. Como símbolos de identidad de los niños con fotos, dibujos y carteles que por su contenido estén relacionados con la zona de que se trate y sirvan para ambientar cada rincón (por ejemplo: carteles de artistas en actividades plásticas, fotos de frutas u verduras en el mercado, etc.)
– La identificación de materiales, manteniendo todo muy ordenado, teniendo un lugar para cada cosa y poniendo carteles con el nombre y el dibujo del material en las estanterías y cajones donde se guarde (por ejemplo: en el bote de los pinceles, el cajón de las tijeras, etc.).
– La identificación de tiempos (como por ejemplo un panel secuenciado donde se representen los distintos momentos del día).
 
Todo esto va a favorecer y reforzar la adquisición de hábitos y capacidades de orden, de trabajo, de organización espacio-temporal, de convivencia, de estructuración mental, de abstracción y codificación.
 
– Establecer claramente las vías de circulación dentro de los espacios de la Ludoteca, para evitar interrupciones e interferencias negativas (choques o cruces inesperados). Para ello, es muy conveniente dibujar un plano de la Ludoteca y marcar las zonas de paso (es mejor hacerlo a través de dibujos animados para que resulte más llamativo).
 
– Diferenciar claramente las zonas secas de las zonas húmedas (o zonas limpias o sucias). Así, por ejemplo, debemos agrupar la zona de juegos de agua cerca de la zona de pintar, porque si las mezclamos habrá muchas interferencias innecesarias. Por este mismo motivo se deben separar las zonas tranquilas de las más ruidosas, si es que las hubiera.
– Delimitar espacios y crear pequeñas zonas o áreas diferenciadas según el tipo de actividades. Para ello se ha de evitar colocar el mobiliario «pegado» a la pared, sino perpendicular, para acotar subespacios (no sólo podemos contar con los muebles, sino también con biombos, elementos colgados del techo, cortinas, estanterías, etc.
 
– Tener en cuenta que las distribuciones cambian según se trate del primer ciclo o del segundo ciclo de la etapa. Quiere decir que en función de la edad que tengan los niños que utilizan la Ludoteca los espacios serán de una forma u otra. Por ejemplo, con los mayores podremos disponer de más mobiliario y acotaciones más pequeñas.
 
– Preferiblemente, el acceso al exterior se hará directamente desde el aula principal o sala de juegos, porque éstos amplían las posibilidades de exploración y descubrimientos, ampliando las que ofrece el espacio interior.
 
– Hay que tener en cuenta que a lo largo del tiempo el espacio utilizado por el grupo que acude a la Ludoteca va evolucionando en función de las necesidades y de los procesos que se desarrollan.

 

Caracter pedagógico de la Ludoteca
Programación en las Ludotecas
Juguetes, juegos, ludotecas, dinámicas
Especialista en Ludotecas. Evolución del juego
Monitor de Ludotecas: dinámica de grupos

 


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